Thursday, February 21, 2008

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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 21: Colonia Cerrito Lindo, San Pedro Sula, Honduras - 3,400 Year Old Burial Removed From Its Place of Discovery
Ten days after its discovery in colonia Cerrito Lindo, San Pedro Sula, Honduras, the rare 3,400 year old burial has been removed by specialists from the Instituto Hondureño de Antropología e Historia (Ihah). The human remains will be investigated by a team of Japonese specialists to determine to which ancient culture the 3,400 individual, nicknamed Andrés after its discoverer, originally may have belonged, as was reported today, Wednesday February 20, 2008 in the online edition of the daily Honduran newspaper La Prensa. The discovery of this burial was reported in several previous Ancient MesoAmerica News Updates (2006, Nos. 16, 17, 19, & 20) (edited by AMaNU):
Trasladan osamenta luego de diez días de espera - Cubierta con bolsas y en una caja de madera sellada fue trasladada a La Lima la ya famosa osamenta encontrada en la colonia Cerrito Lindo.
El hallazgo se produjo hace diez días y será en la oficina regional del Instituto Hondureño de Antropología e Historia, Ihah, donde se hará la limpieza correspondiente para continuar con los análisis.
A las 12.05 del mediodía, una grúa de la Enee extrajo los restos de la fosa de unos 13 pies de profundidad. Los huesos fueron sacados en bloque, en una caja tapada con bolsas y sellada como medida de protección para evitar que los rayos del sol la dañaran.
Raquel Díaz, compañera de hogar de Andrés García, mientras Antropología se llevaba los restos dijo que le daba pesar, pues ya sentía como si fuera de su familia. "Me hará falta; sentía como si fuera un pariente. Lo voy a extrañar", expresó.
Estudios - Las pruebas que se le realizarán a los restos son de carbono 14, ADN y osteotomía para saber en realidad a qué cultura pertenecía. En la regional de Antropología, según lo explicó el arqueólogo Salvador Varela, limpiarán los restos con agua destilada e hisopos, pero quienes realmente realizarán los estudios físicos son antropólogos japoneses que vendrán en marzo.
"Un japonés que dirige un proyecto en Copán hará los contactos con sus compatriotas para realizar las pruebas que determinarán edad, sexo, dieta y traumas que presenta", manifestó.
Descubrimiento - El domingo 10 de febrero, Andrés García excavaba un agujero para construir un pozo séptico cuando se encontró con unos huesos humanos y llamó a La Prensa para reportarlo. La publicación del hallazgo fue nota exclusiva de diario La Prensa [...] (written by Norma Pineda; source La Prensa).

Tuesday, February 19, 2008

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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 20: Colonia Cerrito Lindo, San Pedro Sula, Honduras - Burial Has Not Yet Been Removed, But Has Received A Name
Personel from the Instituto Hondureño de Antropología e Historia (Ihah) was not able yesterday to remove the 3,400 year old burial from the ground where it was found nine days ago. Anthropologist and regional director for the Ihah Aldo Zelaya hopes that the burial will be lifted in one piece, as was reported today, Tuesday February 19, 2008, in the online edition of the daily Honduran newspaper La Prensa (edited by AMaNU):
La osamenta ya tiene nombre: “Andrés” - San Pedro Sula. La osamenta encontrada hace nueve días en el patio de la casa de Andrés García en la colonia Cerrito Lindo, aún no ha sido sacada de la fosa.
Hasta ayer a las 5.00 de la tarde el personal del Instituto Hondureño de Antropología e Historia, Ihah, batallaba para hacerlo, se espera que hoy en horas de la mañana sea sacada. Los expertos utilizaron una especie de cajón y láminas colocadas por debajo para extraerla completamente. El antropólogo y director regional del Ihah, Aldo Zelaya, dijo que lo que se pretende es sacar los restos en bloque y no por piezas.
"Esta forma de sacarla es mejor porque permite que sea estudiada de manera completa y no por pieza", manifestó Zelaya. Según el arqueólogo Salvador Varela el esqueleto pertenece a un hombre de unos cuarenta años de edad y 1.70 metros de estatura perteneciente a la cultura prelenca. "Hay que evaluar el que es el primer hallazgo que se hace de esta magnitud, por la forma del entierro es de unos 3,400 años antes del presente", aseveró.
Según lo explicado por el experto en los lugares en el que las personas realizan este tipo de hallazgos, a los restos se les pone el nombre de la persona que lo encontró.
"Lo llamaremos "Andrés", en honor a la persona que lo encontró", dijo Varela. Los restos serán trasladados a la oficina regional de Antropología con sede en La Lima. Según Varela el cuerpo fue enterrado acostado boca arriba, con los brazos hacia los costados, la mandíbula inferior incrustada en el esternón. "A los restos se le harán los estudios osteológicos para ver qué traumas presenta", aseveró Varela, quien agregó que "es una forma de entierro prehispánico y son las primeras formas de inhumación en el Valle de Sula", expresó.
El presupuesto asignado al Instituto Hondureño de Antropología e Historia, Ihah, es de 37 millones de lempiras. "En la regional del Ihah, operamos con 950 mil lempiras, que es muy poco para lo que necesitamos", aseveró el director Zelaya. El funcionario agregó que los fondos son muy pocos y que les toca cubrir los departamentos de Cortés, Santa Bárbara, Atlántida, Colón e Islas de la Bahía.
Lo que se ha encontrado - Durante las excavaciones hechas por personal de Antropología se han hallado piezas de cerámicas de unos tres mil a cuatro mil años. Además de las piezas de cerámicas se halló una piedra llamada jadeíta que se cree que es la punta de un hacha con la que elaboraban instrumentos.
Prueba - Lo que en realidad determinará la edad de la osamenta es la prueba de carbono 14, y a qué cultura perteneció será el examen de ADN, las muestras las harán en el extranjero (written by Norma Pineda; source La Prensa).

Monday, February 18, 2008

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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 19: Colonia Cerrito Lindo, San Pedro Sula, Honduras - Recently Discovered Ancient Burial To Be Moved Today
Today, Monday February 18, 2008, the online edition of the daily Honduran newspaper La Prensa provided a further report on the recently discovered ancient burial, on which was reported in Ancient MesoAmerica News Updates 2008, Nos. 16 and 17 (edited by AMaNU):
Osamenta será trasladada hoy - La osamenta encontrada hace una semana en la colonia Cerrito Lindo será trasladada este día a La Lima. Personal del Instituto Hondureño de Antropología e Historia, Ihah, continuará con los trabajos de extracción de la osamenta utilizando equipo especial y maquinaria pesada para garantizar que sus huesos no se dañen.
Al sacar los restos, se pretende enviarlos al extranjero para hacerles las pruebas en universidades con las que el Inah tiene convenio. Personal de la Policía Preventiva permanece las 24 horas del día vigilando los restos que permanecen en el patio de la casa de Andrés García, donde se realizó el hallazgo hace una semana y que fue dado a conocer por LA PRENSA.
"Hacemos varios turnos. Unos entramos de mañana y otros de noche, pero no hemos tenido relajos que lamentar. Los vecinos están calmados", declaró Pedro Cálix, miembro de la Policía [...].
Antecedentes - Los restos encontrados en el patio de la vivienda de Andrés García, según el antropólogo y director regional del Instituto Hondureño de Antropología e Historia, Ihah, Aldo Zelaya, podrían pertenecer a un hombre de 1.70 metros de altura.
"Tenemos la sospecha de que puede ser un varón por la altura", aseveró. Zelaya agregó que se descarta que los restos puedan pertenecer a la cultura olmeca, como se ha dicho. "Es cierto que aparecieron unos restos que parecen olmecoides, pero eso no significa que sean olmecas".
El equipo de Antropología al excavar encontró que la osamenta había sido enterrada con los brazos hacia los costados de su cuerpo. Además se encontraron restos de carbón que se cree son de una fogata hecha durante el entierro. "Encontramos porciones de la piedra llamada jadeíta y lo más factible es que un científico les haga los análisis de rigor", manifestó al arqueólogo [...] (written by Ingrid Cruz; source La Prensa).
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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 18: San Miguel Amatlán, Oaxaca/BNAH, Mexico DF - The Zapotec códices San Lucas Yataú and Yatiní
Since circa 50 years the códices San Lucas Yataú and Yatiní are deposited and guarded at the Biblioteca Nacional de Antropología e Historia (BNAH) in Mexico City, on the request of the community of San Miguel Amatlán, located in the Sierra Norte of the Mexican state of Oaxaca. These documents, which are of Zapotec origin and date to the XVII-XVIII century, will be subject of a study by Dutch ethnohistorian Michel Oudijk, as was reported by the Instituto Nacional de Antropologia e Historia on Friday February 15, 2008 (edited by AMaNU; due to unanticipated limited access to the INAH webpage posting takes place today):
A estudio, los códices San Lucas Yataú y Yatiní - Los códices San Lucas Yataú y Yatiní depositados desde hace casi medio siglo en la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia (BNAH), a petición de la comunidad de San Miguel Amatlán, en la sierra norte de Oaxaca, serán motivo de estudio por parte del doctor Michel Robert Oudijk, uno de los principales expertos en la cultura e historia zapotecas.
Ambos lienzos (siglos XVII-XVIII) refieren aspectos históricos, cartográficos y genealógicos del otrora pueblo de San Lucas Yatao, hoy San Miguel Amatlán, así como las colindancias y linderos que corresponden a terrenos comunales a favor de esa población y de las localidades aledañas Lachatao y Yavesía. Tales límites fueron confirmados por decreto presidencial en 1961.
De acuerdo con Carolusa González Tirado, subdirectora de Documentación de la BNAH, se trata de los documentos históricos menos investigados del acervo de la biblioteca, en parte porque poseen caracteres en zapoteco antiguo. Pese a que fueron realizados durante la Colonia, por su estilo indígena, los documentos merecen la denominación de Códices mesoamericanos.
El Códice San Lucas Yataú (“Árbol grande”) está pintado al óleo sobre un soporte de tela de 105 por 86 centímetros, y muestra la existencia de la raza zapoteca que habitaba esa zona antes de la conquista española, así como el encuentro con los invasores en el año de 1615. En tanto, el Códice Yatiní (“Árbol quemado por el rayo”) está pintado sobre una tela de 160 por 117 centímetros.
Durante la visita de las nuevas autoridades de San Miguel Amatlán (municipio de Ixtlán de Juárez) para constatar el estado de conservación de sus códices, Julieta Gil Elorduy, directora de la BNAH, confirmó la aceptación del doctor Oudijk, para analizar los mismos.
“Inclusive el investigador Michel Oudijk ya entregó un previo en torno a las características generales de estos documentos, pero su trabajo también implicará llevar a cabo un recorrido de reconocimiento por los sitios que éstos señalan”, comentó Gil Elorduy ante las 12 autoridades tradicionales que entraron en funciones en enero pasado.
En ese sentido, Óscar Juárez Pérez, presidente municipal de San Miguel Amatlán, mostró su interés porque los niños y jóvenes del lugar también acudan un par de veces a las instalaciones de la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia, en la Ciudad de México, para admirar esa parte de su legado. Esta iniciativa fue recibida con agrado por parte de las autoridades de la biblioteca.
“Este proyecto de visitas nos tiene muy entusiasmados, es necesario que nuestros niños conozcan los escritos antiguos donde se refieren los límites de la comunidad; pero también queremos que ellos empiecen a reconocer de manera directa esos lugares”.
Bajo condiciones estables de conservación —con una humedad relativa entre el 40 y 55 por ciento, y una temperatura que varía de los 10 a los 25 grados centígrados—, los códices San Lucas Yataú y Yatiní forman parte de la colección de códices que resguarda la BNAH y que, desde 1997, son "Memoria del Mundo" por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Con el fin de evitar deterioros debido a la manipulación, la BNAH los digitalizó en alta resolución y así están disponibles para la consulta. También, en 2005, los integrantes de la comunidad de San Miguel Amatlán recibió reproducciones fotográficas de tamaño natural, a fin de que se exhiban de forma permanente en el palacio municipal de la localidad.
Documentos vivos - Los códices San Lucas Yataú y Yatiní, son los únicos que resguarda la BNAH en calidad de depósito; sin embargo, numerosas poblaciones de Oaxaca, Puebla, Guerrero y Tlaxcala, entre otros estados, mantienen en su poder este tipo de documentos histórico-cartográficos.
En opinión de la doctora María Teresa Sepúlveda, también de la BNAH, “se trata de documentos vivos porque todavía se realizan ritos y ceremonias en torno a ellos, y además les transmiten a los jóvenes la tradición oral, es decir, qué es lo que representa el documento. También los utilizan hasta el día de hoy como sostén jurídico para la defensa de sus tierras”.
Reiteró la invitación, por parte de la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia (BNAH), para que varias de estas comunidades tengan la confianza de entregar estos códices, en calidad de depósito. De esa manera la institución se hace responsable de su conservación.
La biblioteca intenta motivar a varias comunidades —independientemente de que entreguen sus documentos en custodia— para que traigan sus códices y aquí se les brinde un tratamiento de conservación; a su vez se les entrega una copia, facsimilar o fotografías en color, para que resguarden los originales”, concluyó (source INAH - Sala de Prensa).
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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 17: Colonia Cerrito Lindo, San Pedro Sula, Honduras - Work On The Recent Discovery Continues
Yesterday, Sunday February 17, 2008, the online edition of the daily Honduran newspaper La Prensa provided a short notice on the recent discovery of the possible Proto-Lencan burial in the Colonia Cerrito Lindo, as reported first in Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 16 (edited by AMaNU):
Encofrada quedó osamenta -La osamenta fue encofrada para protegerla cuando sea trasladada al Ihah de La Lima. Los trabajos para extraer la osamenta encontrada hace una semana en casa de la familia García Díaz ubicada en la colonia Cerrito Lindo se prolongarán hasta mañana.
Los empleados del Instituto Hondureño de Antropología e Historia, Ihah, ampliaron los trabajos por la falta de equipo pesado para sacar los restos del esqueleto. El director regional del Ihah, Aldo Zelaya, coordinó los trabajos para la construcción de un cofre elaborado de madera rústica.
Una vez lista la armazón, será colocado el esqueleto para facilitar su trasladado a la oficina regional de esta entidad estatal localizada en La Lima.
"Se quiere proteger al máximo su estructura esquelética porque a la osamenta le hacen falta miembros", expresó Zelaya. El especialista agregó que la falta de algunas partes, como sus pies, pudieron haberse perdido al momento en que Andrés García realizaba las excavaciones de tierra para construir la fosa séptica de su casa.
"El uso de herramientas pudo triturar los huesos, pues el dueño de la propiedad jamás imaginó con lo que se encontraría", dijo Zelaya (...) (written by Ingrid Carolina Cruz; source La Prensa).

Tuesday, February 12, 2008

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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 16: Colonia Cerrito Lindo, San Pedro Sula, Honduras - Discovery of a 4,000 Year Old Proto-Lencan Burial
Today, Tuesday February 12, 2008, the online edition of the Honduran daily newspaper La Prensa reported the discovery of a possibly 4,000 year old burial of Proto-Lencan origin as found below the patio of a household within the colonia Cerrito Lindo, San Pedro Sula, Honduras (edited by AMaNU):
Osamenta tiene una edad de 4 mil años -"Cada vez que excavaba un hoyo esperaba encontrarme con un tesoro de esta magnitud", expresó Andrés García al momento en que las autoridades del Instituto Hondureño de Antropología e Historia y la Procuraduría General de la República, PGR, llegaron a ver la osamenta encontrada en el patio de su casa.
La curiosidad invadió la colonia Cerrito Lindo, durante todo el día entraban y salían los vecinos quienes se aglomeraban a la orilla del agujero para observar el esqueleto. Los comentarios eran de que si era un cuerpo reciente, otros manifestaban que se trataba de alguien milenario.
Larga espera - A las 2.30 de la tarde y luego de una larga espera las autoridades de Antropología se hicieron presentes para reconocer los restos. Aldo Zelaya, director regional del Instituto Hondureño de Antropología e Historia, dijo que por los restos de cerámica encontrados se trata del periodo formativo. "Es un esqueleto que está bastante completo, es un hallazgo extraordinario posiblemente sea de unos tres mil a cuatro mil años", aseveró.
El experto descartó que se tratara de un cuerpo reciente. "No se trata de un cuerpo que haya sido sepultado, pues la cerámica que se encontró nos da la pauta de que no es de 50 años atrás", manifestó. Zelaya explicó que los restos del cuerpo encontrados en el patio de la vivienda podrían tratarse de una tribu llamada Protolencas.
"ésta es una mezcla de mayas, lencas originales y payas, hay que recordar que éste es un sitio que se encuentra dentro de la ruta conocida como Puerto Escondido", expresó. El procedimiento que sigue luego del descubrimiento de los restos, según lo explicó Zelaya es continuar con las excavaciones para luego trasladar los restos a un laboratorio para analizarlos y por último exponerlos en un museo.
Temor - El temor invadió a los propietarios del terreno ya que piensan que serán despojados de sus pertenencias. "No los estamos desalojando, el decreto 220-96 de la Ley del Patrimonio Cultural, dice que el ciudadano tiene que colaborar con las autoridades", expresó Ángela Madrid, representante de la Procuraduría General de la República, PGR. La funcionaria agregó que: "El Gobierno no puede remunerar a las personas cuando se trata de un hallazgo del patrimonio cultural", aseveró [...] (written by Norma Pineda; source La Prensa).

Monday, February 11, 2008

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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 15: Malpica, Concordia, Sinaloa - New Archaeological Information on the Culture of the Totorame
Recent archaeological discoveries at the site of Malpica, Concordia, in the Mexican state of Sinaloa, shed more light on the culture of the Totorame. The site of Malpica mainly dates to circa AD 200 - 500, but remained occupied to circa AD 700, and its discovery was described first in a short online note on the La Jornada website of January 13, 2008 (which was not posted at Ancient MesoAmerica News Updates). The most important details of the recent findings were described in an online report posted today, Monday February 11, 2008, at the website of the Mexican daily newspaper La Jornada (edited by AMaNU):
Arqueólogos destacan importancia de las ruinas halladas en Malpica - Malpica, Concordia, Sinaloa. La zona arqueológica localizada en Malpica, municipio de Concordia, Sinaloa, que data de entre los años 200 y 500 después de Cristo y fue uno de los puntos principales de la cultura totorame, perteneciente al señorío de Chametla, es de las más importantes y más grandes que se han localizado en la región, afirmó María de los Ángeles Heredia Zavala, delegada del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Detalló que el hallazgo revelará nuevas aportaciones para la historia y el estudio de la cultura de Sinaloa debido a que es un sitio que no estaba registrado. Data del periodo clásico Aztlatlan, el material localizado tiene semejanza con la cerámica de Chametla y algunas figurillas son parecidas a los centros del norte de Sinaloa, lo que pudo ser un sitio intermedio entre las dos culturas.
En el sitio se ubicaron dos lomas; en una se localizó un entierro y pudo ser el área más importante o centro ceremonial; la otra fue un taller, lo que demuestra que allí mismo elaboraban las piezas que usaban. Se encontró también cerámica policromada, figurillas, algunos raspadores, obsidiana, cuchillos de este material, además de piedras blancas y cuarzo, semejantes a piezas que se tienen en el museo arqueológico de Mazatlán, que pueden ser originarias de esta región, explicó el arqueólogo Joel Santos Ramírez.
La delegada del INAH en Sinaloa observó que la zona es rica en material arqueológico que se localizó en la superficie. Ubicaron una fosa en la que había un cuerpo con deformación craneana, orientado hacia occidente, postura típica de los entierros que se han localizado en los culturas de la entidad; el hallazgo fue cubierto con tierra para evitar su erosión y conservarlo para su estudio.
La titular del INAH en la entidad, acompañada por un equipo del instituto, el arqueólogo Joel Santos Ramírez y el museógrafo Diego Reyes realizaron un recorrido por la zona arqueológica, afirmaron que las cerámicas que se encontraron en el sitio y las recolectadas en la comunidad son ollas, cajetes, figurillas sólidas de mujeres con semejanza a las que se han localizado en la cultura de Chametla. También participaron funcionarios del municipio.
El arqueólogo del INAH Joel Santos precisa que las ruinas encontradas en esta comunidad son de las más antiguas del sur de Sinaloa y de alguna manera están relacionadas con las culturas del occidente y noroccidente de México; al parecer se trata de una población primigenia de Mesoamérica de la zona noroeste, que tiene correspondencia con Nayarit, Jalisco y Colima
Explicó que las evidencias de las primeras culturas que poblaron la región datan del año 100 antes de Cristo y principalmente del año 250, hasta alrededor del 700, como es el caso de Malpica, lugar donde se encuentran elementos de un cambio cultural y una transición que parece haber ocurrido; su estudio revelará más información de la cultura que habitó este asentamiento.
El hallazgo arqueológico - Las formas de las piezas localizadas en este sitio corresponden el estilo de las culturas antiguas del sur de Sinaloa, que están bien definidas temporal y regionalmente; por ejemplo, en el sur se localizan Escuinapa, Chametla, El Río Presidio y ahora se incluye Malpica.
Santos Ramírez detalla que algunas figurillas encontradas no tienen dorso; en este tipo de cerámica predomina el color rojizo que adquieren por el óxido y el tiempo de cocción. Es un tipo de arcilla típico de la región; además se nota mucha contaminación de cuarzo por la arena, ya que las hacían aquí mismo –indica el lugar donde se ubica el montículo de cuarzo– tenían un acabado en blanco y hay una intención de darle terminación artística.
El arqueólogo del INAH explica que entre las piezas de cerámica predominan figurillas, malacates y representaciones de gente trabajando la piedra, sobre todo en labores de molienda, hachas de gargantas e incluso algunos elementos de obsidiana, por lo que la presencia de este material resulta interesante, porque es un vidrio volcánico y la veta más cercana está en Jalisco, lo que significa que se “importó” el producto, lo que reflejaría amplias relaciones comerciales y culturales.
Diseños geométricos - Un pedazo de cerámica policroma, que debió ser un pequeño plato, hallado en el sitio, presenta un tipo de decoración de banda negra al borde –señaló el experto–, un fino trabajo esgrafiado y decorado con inserciones parecidas a líneas en zig-zag que se han visto en otro tipo de vajillas, lo mismo que los círculos que se aprecian en la misma, que remiten a la representaciones geométricas características de las culturas más antiguas y tienen que ver con diversos aspectos de la naturaleza; en este caso son diseños más geométricos, parecidos a los grabados rupestres.
El arqueólogo Santos Ramírez describe que una de las características de los enterramientos en el área del sur del estado, en comparación con otras regiones, es que los huesos se depositaban en urnas y, adentro de éstas, en vasijas miniaturas, característica única del sur del estado.
El culto a los muertos era muy destacado. Los cuerpos eran sometidos a todo un ritual: se les deformaba el cráneo, eran enterrados en urnas hasta que sólo quedaban los huesos, posteriormente hacían un bulto pequeño y los introducían en urnas.
Sobre las urnas funerarias no hay investigación suficiente, dijo; “es algo que nos falta por estudiar, pero sabemos que desde el año 400 después de Cristo hasta 1100 o 1200 se practicaron enterramientos en las culturas de Sinaloa y no hay otras partes en México donde se haya hecho esto, sepultar en urnas los restos humanos, y en todo el estado se han encontrado.
Para Joel Santos Ramírez, por la localización de este sitio el INAH tendrá que emprender un rescate arqueológico, además de un conjunto de acciones con la comunidad para iniciar un programa en el que participen los habitantes para coadyuvar en la conservación del patrimonio arqueológico; en esto también debe incluirse la participación del ayuntamiento para solicitar que respalde la vigilancia con personal adecuado en el sitio y evitar que continúe el saqueo.
El arqueólogo hace referencia a que los sitios característicos de Sinaloa se han hallado en la zona costera y los que se han localizado a pie de tierra han sido poco explorados; prácticamente es nulo el trabajo de estas zonas y no se ha elaborado un planteamiento arqueológico para conocer cómo se desarrollaron las culturas serranas (written by Irene Sánchez; source La Jornada).

Sunday, February 10, 2008

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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 14: Templo Mayor, Mexico City - Coyolxauhqui Stone Was Used In Human Sacrifices Dedicated To The Sun God
Discovered 30 years ago, as described in the previous Ancient MesoAmerica News Update, the Coyolxauhqui stone was probably used as the recipient of human sacrifices that were offered in honor of the Mexica-Azteca sun god, as was suggested by archaeologist Felipe Solís Olguín in a presentation yesterday, Saturday February 9, 2008, and for instance posted online by the Mexican daily newspaper Vanguardia (edited by AMaNU):
Era monolito de la Coyolxauhqui recipiente de sacrificados - El monolito azteca de la Coyolxauhqui, descubierto hace 30 años, fue utilizado como el lugar donde caían los cuerpos de los hombres sacrificados en honor al Sol, aseguró aquí el arqueólogo Felipe Solís Olguín, al participar en un ciclo de charlas con las que se conmemora el hallazgo de la escultura. De acuerdo con información del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Solís refirió además que el uso de la piedra labrada se daba durante los rituales que recreaban el mito sobre el nacimiento de Huitzilopochtli, deidad central de los mexicas.
Por ello, explicó, el monolito había sido ubicado al pie del adoratorio del dios mexica, localizado en la parte sur del Templo Mayor de Tenochtitlán, desde cuya cima eran arrojados los cuerpos de los prisioneros sacrificados para que cayeran sobre el monolito de la deidad femenina relacionada con la Luna y los vencidos. El arqueólogo, quien participó en la identificación de la diosa en 1978, explicó que a diferencia de otros monolitos, como el Calendario Azteca, que fue removido en la Epoca Colonial (1521-1821), éste se encontró en el mismo lugar que ocupó en la antigua Tenochtitlan.
Solís habló en el marco de las actividades académicas celebradas con motivo del 30 aniversario del hallazgo del monolito de la Coyolxauhqui, ocurrido el 21 de febrero de 1978.El hallazgo arqueológico del relieve, detalló, se dio en el mismo lugar que ocupaba en la época prehispánica, en el arranque de la escalinata de acceso al adoratorio de Huitzilopochtli, que se encuentra en la cima del Templo Mayor. "De esta manera los mexicas representaron el mito del nacimiento de Huitzilopochtli, en el que se relata que Coatlicue, su madre, estaba barriendo y se encontró una bola de plumas que guardó en su vientre y quedó embarazada. Al saber esto, su hija, Coyolxauhqui, y sus hermanos, las 400 estrellas, intentan matarla y se inicia un combate.
"Huitzilopochtli nace armado en el cerro Coatepec y mata a su hermana, la cual cae desde la cima y queda desmembrada en el suelo", explicó.Este episodio solía representarse durante los rituales que se hacían en la festividad del Panquetzaliztli, en la que se efectuaba el sacrificio de guerreros capturados en combate y que eran ofrendados en honor a Huitzilopochtli, dios de la guerra y el Sol, abundó. "Al igual que fue arrojada Coyolxauhqui desde la cima del cerro Coatepec, una vez inmolados los cuerpos de los cautivos de guerra eran lanzados desde lo alto del Templo Mayor y rodaban por la escalinata, hasta caer sobre el disco de Coyolxauhqui, el cual servía como recipiente sagrado", apuntó.
"Primero eran decapitados, al igual que la Coyolxauhqui, para posteriormente ser despeñados desde lo alto del adoratorio a Huitzilopochtli. Los cuerpos caían sobre el monolito, una especie de recipiente", dijo.De acuerdo con los fechamientos, el monolito fue creado entre los años 1469 y 1881 de nuestra era, durante el reinado de Axayácatl y formaba parte de la etapa constructiva IVb del Templo Mayor de Tenochtitlan (Notimex; source Vanguardia).

Wednesday, February 6, 2008

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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 13: Templo Mayor, Mexico City - Notes on the Discovery of the Coyolxauhqui Stone
Today, Wednesday Fevbruary 6, 2008, the Instituto Nacional de Antropologia e Historia posted a short report on the discovery of the Coyolxauhqui stone, on February 28, 1978 (edited by AMaNU):
Se cumplen 30 años del descubrimiento de Coyolxauhqui - A coro y sin salir por completo del asombro, el equipo de arqueólogos que trabajó casi 12 horas continuas —de las 17:00 del día anterior hasta las 4:30 de la madrugada— para descubrir a Coyolxauhqui, empezó a entonar Las mañanitas el 28 de febrero de 1978 para la diosa mexica de la luna, que resurgía de la tierra después de 500 años.
Atrás habían quedado las especulaciones: ni Huitzilopochtli, ni Quetzalcóatl, ni Tláloc… “de Coyolxauhqui sólo se conocía una representación, la cabeza de diorita que se encuentra en el Museo Nacional de Antropología, pero nunca imaginamos que existiera una imagen completa de la deidad y con todas las características que refiere el mito”.
“Los arqueólogos Felipe Solís y Gerardo Cepeda comenzaron a dilucidar su identidad y para corroborarlo, Gerardo, quien vivía a unas cuadras de las esquina de Guatemala y Argentina, en el Centro Histórico, fue a su casa y trajo un libro en el que aparecía la descripción”, recuerda 30 años después Raúl Martín Arana, el principal protagonista de esta historia.
Luego de retirar 15 centímetros de sedimento prehispánico, se vislumbraba en su totalidad un monolito de más de 3 metros de diámetro y 8 toneladas de peso, con un relieve que mostraba a la diosa decapitada y mutilada de brazos y piernas. Estaba como fue colocada entre 1469 y 1481 d.C., al pie del que fuera el adoratorio de Huitzilopochtli, el hermano solar que la derrocó.
Entre los 17 arqueólogos (algunos todavía alumnos) que se encargaron de este agotador descubrimiento y quienes poco más tarde estarían celebrando con un desayuno en el café de chinos El Popular —en la calle 5 de Mayo—, se encontraban también Samuel Mata, Carlos Salas, Román López, Guillermo Ahuja, Francisco Hinojosa y, claro, Carmen Chacón, compañera de ahí en adelante, de Raúl Arana.
Estos investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) fueron los que hicieron el trabajo en el sitio. "Para nosotros fue maravilloso... sentirla, tocarla, haber visto sus colores, esa magia de los grandes relieves… Recuerdo que la íbamos a visitar por las noches como si fuera una ‘mala mujer", con un foco rojo, sonríe Arana.
“Ya en serio, tuvimos que colocar una lámpara de infrarrojo para ver por las noches las tonalidades y otros aspectos. Acabamos haciendo lo mismo que los trabajadores de la Compañía de Luz, trabajamos de noche porque en el día era imposible, era la visita de todo el mundo: los periodistas, que todo querían saber; los amigos del amigo del político. Así nuestro horario era de las 23:00 horas a las 5:00 de la mañana”.
Raúl Arana, quien abrió el ciclo de conferencias 30 años de Coyolxauhqui y el Proyecto Templo Mayor —sábados de febrero y 1 de marzo en el Museo del Templo Mayor— reveló al público la parte emotiva, cautivadora, de este hallazgo que fue el detonante para mayores estudios sobre la civilización mexica e, inclusive fue parte importante en la justificación para inscribir al Centro Histórico de México como Patrimonio de la Humanidad.
A partir del descubrimiento de Coyolxauhqui, el investigador, hilvanó otra serie de anécdotas relacionadas con la política y la burocracia. Cabe mencionar los trabajos por develar la escultura, como lo fue el cambio de fecha de una visita oficial del presidente José López Portillo.
En las siete semanas posteriores a este suceso, señaló Raúl Arana. “supimos que afortunadamente nunca la vieron los españoles, salió otra representación en mosaico de Coyolxauhqui —debajo de la primera—, ofrendas aparecieron en los cuatros puntos de la excavación…”
“Nos dimos cuenta cómo la Coyolxauhqui, con cariño, se guardó durante 500 años para que la viéramos todos. Yo considero que no hay ninguna pieza con la perfección, como personaje humano, con que está hecha Coyolxauhqui. La maravilla es el trabajo que hicieron quienes la esculpieron… hubiera deseado conocerlos aunque fuera en sueños” (source INAH - Sala de Prensa).

Tuesday, February 5, 2008

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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 12: Templo Mayor, Mexico City - 30 Year Anniversary of the Discovery of the Coyolxauhqui Stone
In April of 2008 the exhibit entitlef Coyolxauhqui y el Templo Mayor: 30 años reconstruyendo el pasado will oen, to celebrate the 30 year anniversary of the discovery of the Coyolxuahqui stone at the precinct of the Templo Mayor. In February (9th, 16th, and 23rd) and March (1st) a series of lectures is planned that will discuss the 1978 discovery as well as the most recent archaeological discoveries, as was reported by the Instituto Nacional de Antropologia e Historia on their website today, February 5, 2008 (edited by AMaNU):
Coyolxauhqui, partera de la arqueologia mexica - Con motivo de las tres décadas del descubrimiento de la Coyolxauhqui, el Museo del Templo Mayor ha preparado un ciclo de conferencias en las que se abordará su hallazgo y rescate, su simbolismo, su reconstrucción cromática, una retrospectiva del Proyecto Templo Mayor y los resultados de las recientes excavaciones realizadas en el área.
Imagen convertida en pieza emblemática del Museo del Templo Mayor y de nuestra nacionalidad, el monolito de la diosa lunar Coyolxauhqui cumple 30 años de haber sido descubierta para atestiguar el renacimiento de los vestigios del principal edificio de la antigua ciudad de Tenochtitlan, aportando así grandes conocimientos sobre la sociedad mexica y su cosmovisión.
Después de cinco siglos de permanecer oculta, el 28 de febrero de 1978 apareció nuevamente La de los cascabeles en el rostro, y como toda mujer “caprichosa” —expresa su afortunado descubridor, el arqueólogo Raúl Arana—, obligó al cierre de una calle (Guatemala), a la expropiación de 40 mil metros cuadrados de terreno que dieron paso a la conformación del Proyecto Templo Mayor, a una declaratoria de Centro Histórico y a una historia de hallazgos sin fin.
Los arqueólogos Raúl Arana Álvarez, Felipe Solís, Lourdes Cué y Fernando Carrizosa, Eduardo Matos, y Leonardo López Luján, serán los encargados de hablar sobre la importancia de este monumento. Las ponencias se llevarán a cabo los días sábado del presente mes, además del 1 de marzo, en el Auditorio “Eduardo Matos Moctezuma” del recinto, a partir de las 10:00 horas.
En conferencia de prensa, Matos comentó que estas charlas irán de lo anecdótico a los datos científicos más recientes obtenidos sobre Coyolxauhqui. En este sentido destaca una segunda versión, propuesta por Cué y Carrizosa, sobre la policromía original del monolito —básicamente amarillo ocre, rojo y azul, colores que se han perdido casi por completo— y su significado. Una primera hipótesis fue realizada por la doctora Carmen Aguilera.
Asimismo —dio a conocer el doctor Carlos González González, director del Museo del Templo Mayor—, para el mes de abril, ese espacio prepara la magna exposición Coyolxauhqui y el Templo Mayor: 30 años reconstruyendo el pasado (1978 – 2008), la cual brindará una retrospectiva de los aportes científicos generados por el Proyecto Templo Mayor, esto a partir de la exhibición de piezas —algunas de ellas inéditas—, recuperadas en excavaciones.
En tanto, como parte de una pequeña muestra: Pieza del mes, se exhibirán monedas y billetes puestos a circulación por el Banco de México, en distintos años, con la representación de la diosa lunar mexica. Además, en próximas fechas se emitirá un billete de lotería conmemorativo.
Aunque no hay certeza de la fecha exacta de su descubrimiento: el 21 de febrero cuando trabajadores de Luz y Fuerza del Centro se topan con la escultura; o la madrugada del 23 cuando Raúl Arana acudió a la esquina de Guatemala y Argentina tras el reporte del ingeniero Orlando Gutiérrez; para Arana éste no ocurrió sino hasta las 4:30 de la madrugada del 28 de febrero, previo a la visita del presidente José López Portillo.
“La cuadrilla de trabajadores electricistas pudo efectuar el hallazgo, pero el verdadero descubrimiento de Coyolxauhqui, hablamos de su identificación científica realizada por 17 investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), coordinados por el arqueólogo Ángel García Cook y por mí, ocurrió el 28 de febrero”.
Hija de Coatlicue, hermana de Huitzilopochtli - Mito de Coyolxauhqui surge cuando Coatlicue (la tierra), al barrer su templo en el cerro de Coatepec, queda preñada por unas plumas de colibrí que, provenientes del cielo, ella había guardado en su pecho. Este hecho disgusta a su hija, Coyolxauhqui, quien junto con sus hermanos, los 400 Centzon Huitznaoa (las estrellas), decide matarla al considerar ese embarazo, una afrenta.
Cuando la luna y las estrellas estaban a punto de asesinarla, nace Huitzilopochtli (el sol), quien ataviado para la guerra y armado con una serpiente de fuego llamada Xiuhcóatl, decapita a Coyolxauhqui y la arroja del cerro de Coatepec. Al caer fue desmembrándose, tal y como muere la luna cada mes derrotada por el sol.
Lo anterior explica el fenómeno celeste mediante el cual la luna muere y nace por fases, por ello Coyolxauhqui fue encontrada al pie de la escalinata del adoratorio de Huitzilopochtli, en el Templo Mayor. De acuerdo con el arqueólogo Eduardo Matos, ese mito fue convertido en ritual a través de la fiesta de Panquetzaliztli, en la que eran sacrificados prisioneros para Huitzilopochtli.
El relieve de Coyolxauhqui muestra a la diosa decapitada y mutilada de brazos y piernas, con gotas de sangre que manan de las extremidades y que dejan expuestas las coyunturas óseas. Está adornada con un cinturón de serpiente bicéfala rematado con un cráneo en su espalda. Mientras la serpiente de dos cabezas se repite en los atados de muslos y brazos, las articulaciones y los talones de sus pies están adornados con mascarones compuestos por un rostro de perfil provisto de colmillos.
El tronco, con los pechos flácidos, está de frente, en tanto que sus caderas dan un giro mostrándose de perfil y obligando a las extremidades colocarse de igual forma. Su cabeza porta un gran penacho de plumas y su cabello está adornado con círculos. Las orejeras, compuestas por tres figuras geométricas, enmarcan su rostro, cuyo ornamento principal, los cascabeles en la mejilla, dan nombre a la diosa de la Luna.
El monolito de Coyolxauhqui fue tallado en andesita y colocado al pie del templo de Huitzilopochtli en la época del tlatoani Axayácatl, entre 1469 y 1481 d.C. Mide 3.25 metros de diámetro máximo y 30 centímetros de espesor, y su peso aproximado es de ocho toneladas.
Actividades paralelas - Para esta conmemoración, el Departamento de Servicios Educativos del Museo del Templo Mayor ha preparado, a su vez, distintos actividades en las que la diosa mexica será el eje principal.
Talleres de pirograbado en guajes, y de elaboración de libros en papel amate y de dulces tradicionales en azúcar glass, dirigidos a niños y adultos, tendrán lugar los días sábado de febrero, a partir del 9, en la explanada de la zona arqueológica (donativos de $35.00 a $50.00).
Los mitos sobre el nacimiento de Huitzilopochtli y el de Coyolxauhqui, se abordarán, respectivamente, a través de la narración oral y un espectáculo con títeres. El primero, de entrada gratuita, se realizará los sábados de este mes, a las 10:00 y 12:00 horas. Mientras, el montaje a cargo del grupo Luna Llena, se llevará a cabo los domingos de febrero en punto de las 13:00 horas (donativo de $80.00) (source INAH - Sala de Prensa).

Monday, February 4, 2008

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Ancient MesoAmerica News Updates 2008, No. 11: Mexico City - Study on the Residential Zones of Tenochtitlan
The study "Las zonas residenciales de Tenochtitlan según las fuentes coloniales", written by Alejandro Alcántara Gallegos, has obtained the "Francisco Javier Clavijero" award of the Instituto Nacional de Antropologia e Historia. The most important findings of this study are summarized in a report posted Saturday February 2, 2008, in the online edition of the daily Mexican newspaper La Crónica de Hoy (edited by AMaNU):
Realizan estudio sobre las zonas residenciales de Tenochtitlan - Debido a la amplia ocupación habitacional de la capital, los avances arqueológicos en torno al conocimiento de los barrios que conformaron la Ciudad de México-Tenochtitlan son paulatinos.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) dio a conocer que, no obstante, un reciente estudio de carácter histórico brinda mayores luces sobre aspectos tan importantes como las formas de propiedad y usos de suelo en la metrópoli mexica. En la investigación "Las zonas residenciales de Tenochtitlan según las fuentes coloniales", el historiador Alejandro Alcántara Gallegos clasificó el tipo de predios que podían encontrarse dentro de un mismo barrio tenochca, a partir de los planos de 29 de ellos.Por ese trabajo, Alcántara obtuvo el Premio "Francisco Javier Clavijero", del Instituto Nacional de Antropología e Historia, en la categoría de licenciatura.
En opinión del académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), si bien se han dado adelantos importantes gracias a los trabajos del Programa de Arqueología Urbana (PAU) del INAH, la información acerca de este tema es fragmentada y se centra sobre todo en el centro ceremonial representado por el sitio del Templo Mayor. Existe información arqueológica sobre dos o tres predios, pero esto no permite tener una visión de conjunto de las áreas residenciales, es decir, del común.
En la investigación se exponen 29 predios con sus respectivos planos, los cuales se describen y proporcionan información que brinda un amplio panorama.Para ello, Alejandro Alcántara se dio a la tarea de indagar en fuentes del periodo virreinal, principalmente a resguardo del Archivo General de la Nación (AGN):Crónicas de los frailes Bernardino de Sahagún, Agustín de Vetancurt y Juan de Torquemada, así como diversos planos, entre ellos el atribuido a Hernán Cortés, el de Santa Cruz y del Alferez Iniesta Bejarano. Además de realizar la traducción del náhuatl y paleografía del castellano. En los archivos coloniales del AGN se puede llevar a cabo un seguimiento de la propiedad de muchos de estos predios, incluso desde antes de la Conquista hasta 1790-1800.
Lo anterior permite observar cómo a pesar de los cambios que supuso la sociedad colonial, en lo fundamental se conservaron los rasgos de estos predios por lo menos hasta la entrada de las Reformas Borbónicas hacia la segunda mitad del siglo XVII."El predio más temprano localizado data de alrededor de 1550, la mayoría corresponden al siglo XVI, algunos se escapan a los siglos XVII y XVIII. Las fuentes señalan la manera en que los indios regresaron y reconstruyeron sus casas. Pese algunas transformaciones, los límites de los predios siguieron siendo los mismos, y la organización comunal, a través de los calpullis, tampoco varió, sino hasta décadas más tarde".
El especialista explicó que respecto a los predios mexicas se puede hablar de un modelo "único", el cual, sin embargo, iba adquiriendo formas diferentes en cada momento.Este prototipo consistía en islotes artificiales o tlaxilacallis, caseríos rodeados por alguna calzada, camino, canales o hilera de chinampas, cuya forma podía ser regular o mixtilínea. Probablemente por presiones demográficas, hubo subdivisiones en los predios y aglomeración, para conformar callejones que parecían derivar en forma de laberinto, tal y como se puede ver hasta hoy día en pueblos de algunas delegaciones como Xochimilco, Tláhuac y Milpa Alta. Esto demuestra que dicho modelo era general para todo el Valle de México.
En estos callejones estrechos, incluso de una braza de ancho, se distribuían predios con características muy distintas, pues cada grupo tenía la libertad de disponer sobre su espacio. Alejandro Alcántara brinda en su trabajo una clasificación de dicho uso, ordenación por medio de cuatro tipos: El primero de ellos era de utilidad exclusivamente residencial; el segundo refiere aquellos predios con chinampas domésticas, mientras un tercero comprendía alguna instalación de carácter productivo o de servicio -temazcal u hornos, éstos últimos se extendieron hasta la Colonia para la cocción del pan-; y, por último, los predios "multi-utilizados" que incluían los aspectos anteriores.
De acuerdo con el historiador, los barrios se concentraban en las cuatro parcialidades de México-Tenochtitlan: Atzacoalco, Cuepopan, Teopan y Moyotlan, donde sobre los templos locales se erigieron varias iglesias.Entre ellas figuran San Sebastián, Santa María de la Asunción o de la Redonda, San Pablo y San Juan Bautista, respectivamente. Estas, en parte, sirven como referente para delimitar hasta hoy día las inmediaciones de la antigua ciudad. En la época prehispánica, al centro de los señalados islotes artificiales que por sí mismos eran barrios, existía una plaza que fungía como centro de reunión, con su pequeño templo y algunas instalaciones, entre ellas, la casa de tequitlalli, donde se reunían el consejo de ancianos.
Esta disposición corresponde todavía con algunas iglesias y plazas relativamente cercanas al Centro Histórico: San Salvador el Verde, San Antonio Tomatlán, Atlixco, La Candelaria.Probablemente la parcialidad de Moyotlan era una zona más urbanizada en contraste con Atzacoalco, donde había áreas verdes y de cultivo, y hasta para la caza. Cuepopan, por su parte, servía como lugar de paso para el mercado de Tlatelolco, poseía embarcaderos y más calzadas que los otros cuadrantes; mientras, algunos autores, señalan a Teopan como el sector más extenso en dirección sur.
Según Alcántara Gallegos, contrario a la idea generalizada sobre la transgresión del sistema de propiedad indígena, por parte de los españoles, "existen datos en las fuentes coloniales, en las que se establece la indemnización que debió dar algún español al indígena, por su predio. O alguna modificación que el propio extranjero debió parar porque afectaba el terreno del mexica.Por lo demás, la estructura de esos barrios siguió siendo la misma, pero mucha población indígena diezmó a causa de las epidemias y otra más emigró.
De tal suerte que se fue despoblando el territorio y los predios comenzaron a entrar en manos de españoles y de la iglesia, ya para 1760 con las Reformas Borbónicas se dan los verdaderos cambios en la traza urbana de la Ciudad de México, concluyó (Notimex; source La Crónica de Hoy).