El investigador es miembro de El Colegio Nacional y ha ocupado diversos cargos en el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), además de haber recibido varias distinciones. El año pasado fue homenajeado por su fructífera trayectoria.
Cobijo del mundo prehispánico - En entrevista con La Jornada, efectuada en el Templo Mayor, donde por su conocimiento del sitio se mueve con mucha soltura, Matos Moctezuma manifiesta ser un hombre feliz, con objetivos y retos que asume y ha afrontado durante su larga trayectoria en el ámbito de la arqueología.
Cobijado por ese mundo prehispánico que ha investigado desde hace 30 años –tras el hallazgo del monolito de la Coyolxauhqui–, el autor de Muerte al filo de la obsidiana asegura que su Premio Nacional de Ciencias y Artes reconoce “una labor de toda la vida”. Prosigue: “Este galardón no es un hecho fortuito. Es gracias a lo realizado durante tantos años y por lo que me siento orgulloso; pero, también, buena parte de este premio es para los investigadores que han colaborado conmigo, así como para el INAH, que me ha cobijado como investigador y arqueólogo”.
Ahora viene el momento de recapacitar sobre lo que se ha hecho y reflexionar hacia el futuro. “No puede uno conformarse y ya. Seguiré investigando y escribiendo; así como Carlos Prieto (otro de los galardonados con ese premio nacional) seguirá tocando el chelo maravillosamente”. Sin embargo, Matos Moctezuma dice que tiene como enemigo el transcurrir del tiempo para emprender diversos proyectos.
“El tiempo se acorta y no es como cuando uno tiene 30 años y un panorama amplísimo, pero a futuro sí quisiera concretar mis ideas sobre la historia de la arqueología y sobre el tema de la muerte en el mundo prehispánico.” Para el coordinador del Proyecto Templo Mayor, infinidad de cosas se le han quedado en el tintero, “pero todo lo que me he propuesto, lo he realizado, tal vez en menor o mayor escala de lo programado. Ahora trabajo en un libro sobre la historia de la arqueología y, recientemente, publiqué –junto con otros especialistas– sobre los hallazgos en Tlatelolco, en la Revista de Arqueología Mexicana.
Vicisitudes del oficio - Matos Moctezuma explica sus vicisitudes en el oficio que ejerce desde hace muchos años. “Los aportes de la arqueología mexicana han revolucionado el conocimiento desde hace 25 o 30 años, porque antes eran menos investigadores y avanzábamos a paso lento; a lo largo de los años se dispararon nuevas técnicas, sobre todo en aspectos de fechamiento, superficie, detección de materiales y análisis de diferentes tipos.”
A decir de Matos Moctezuma, esa revolución tecnológica ha aclarado muchas cosas y enriquecido el panorama arqueológico para que se obtenga información precisa, con mayor certidumbre, de las hipótesis planteadas.
Matos ha publicado más de 400 textos –entre libros y revistas– y participado en trabajos de investigación en las zonas arqueológicas de Teotihuacán, Tula, Cholula, Tlaltelolco y Tenochtitlán. “He tenido la suerte de trabajar en cinco de las grandes ciudades prehispánicas, pero las cuatro primeras fueron un gran aprendizaje para el establecimiento de la zona arqueológica del Templo Mayor.”
–Si Eduardo Matos pudiera elegir a un personaje prehispánico para encarnarlo, ¿quién sería?
–Me gustaría ser Eduardo Matos. Nunca me he ubicado en el deseo de ser tal o cual persona.
–Luego de los recientes hallazgos tanto en Las Ajaracas como en Tlatelolco, ¿qué más esperan descubrir?
–Las investigaciones no cesan, pero sin duda aparecen nuevos datos, se van a reformar algunos y otros se desecharán.
–Todavía es factible hallar los restos de un tlatoani mexica o un alto dignatario debajo de donde estaba Tlaltecuhtli?
–El arqueólogo Leonardo López Luján cuenta con un equipo completo de biólogos y de especialistas inmersos en ese trabajo; se ha avanzado poco, debido al exceso de agua que impide continuar las excavaciones. Hasta la fecha el planteamiento está dado y esperaremos qué nuevos datos nos ofrecerá la arqueología, pero hasta ahora no vemos una información que cambie la hipótesis inicial.
Viaje a España - Antes de viajar a España para impartir una serie de conferencias, Matos Moctezuma recibirá su premio y, después, encabezará las pláticas sabatinas en el Museo del Templo Mayor, a propósito de las tres décadas del hallazgo de la Coyolxauhqui, la deidad lunar, las cuales se iniciarán el 2 de febrero para concluir el primero de marzo.
Eduardo Matos impartirá el 23 de febrero, a las 10 horas, la conferencia El Templo Mayor: una retrospectiva de 30 años de investigación (written by Ana Mónica Rodríguez; source La Jornada).